En Legends siempre defendemos que no haya nada en el mundo que represente a un club y a una afición mejor que su armadura y sus colores. Y este es el caso que nos ocupa hoy. Porque hay pocas combinaciones de colores en el mundo que se asocien tanto a un club como el verde y el blanco al Betis. Lo que igual no sabías es que en sus inicios, el color de la armadura del Betis no era verdiblanca sino azul. ¿Cómo empezó el Betis a vestir de verdiblanco? Te lo contamos a continuación.
Para contar esta historia tenemos que trasladarnos hasta Escocia, concretamente hasta Glasgow. Y es que por aquel entonces las ciudades de Sevilla y Glasgow estaban muy bien conectadas por el trasporte marítimo.
En 1910, el Sevilla Balompié disputa un partido amistoso contra el Betis Football Club y será el primero en el que el Betis juegue de verdiblanco. Y todo porque, Manuel Ramos Asensio, que había estudiado en Inglaterra y tenía buen nivel de inglés, había gestionado la llegada de algunas camisetas procedentes de Escocia que llegaron en alguna de las muchas embarcaciones que hacían el trayecto Escocia-Sevilla. Las camisetas, obviamente eran del Celtic de Glasgow.
A partir de ese momento, Ramos Asensio organizó algunos amistosos contra las tripulaciones de estos barcos, y en ellos llegaron más camisetas verdiblancas y balones que se usaban en esos partidos.
Solo el estallido de la Primera Guerra Mundial hizo que el Betis dejara de utilizar aquellas camisetas verdiblancas, ya que las campañas de los submarinos alemanes contra los buques que abastecían a Gran Bretaña hacían muy difícil la circulación marítima.
Una vez finalizada la guerra, el Betis recuperó aquellas camisetas procedentes de Escocia y el verdiblanco se instalaría para siempre en la armadura del equipo hasta día de hoy. Con estas camisetas también desapareció el azul, que solo volvería en la temporada 2021-2022 para rendir homenaje al color con el que nació el Betis pero que ya nadie recuerda.